Asradi, las sirenas de la mitología nórdica

 

 A pesar de que no son muy conocidas ni tampoco muy populares entre las leyendas de la mitología nórdica, las sirenas también tuvieron un papel importante en los mitos escandinavos. Conocidas como Asradi, eran vistas como deidades marítimas.

Su historia cuenta que se trataba de criaturas acuáticas siempre femeninas, de gran belleza y fragilidad. Poseían increíbles poderes, tan poderosos como los de los dioses del mismísimo Asgard.

Uno de los aspectos característicos que más destacaba de ellas era su blanca tez, casi reluciente cuando la luz de la luna impactaba en ella, al igual que su pelo, que era de un color azul intenso que parecía de cristal.

Éstas habitaban en las profundidades de las heladas aguas del Mar del Norte y sólo aparecían en contadas veces. Sólo en las noches de cielos claros y abiertos, puesto que les gustaba bañarse a la luz de la luna para que ésta plateara su pelo.

Se dice que la luz de la luna era su manera de nutrirse durante sus largos siglos de vida. Sin embargo, los rayos de sol les provocan la muerte.

Relación de las Asradi con el resto de seres de la mitología nórdica

Las Asradi evitaban cualquier tipo de contacto con los humanos, especialmente con los hombres. Eran los seres de los nueve mundos del  que más temían.

Este temor era debido a que éstas, al sentir la mirada de un hombre en
cima de ellas, las convertía en agua, la materia por la cual estaban compuestas.